Con el uso de mascarillas, desinfectantes y el smog pasan la cuenta a nuestro rostro. Manchas, espinillas, brotes de alergias, resequedad o sudoración son consecuencias de esta nueva realidad que llegó para quedarse. Te invito a conocer variadas formas de confeccionar tus propias máscaras caseras que contienen las 3 B.
Aceite de Oliva: Es un producto que está presente en la mayoría de las cocinas chilenas. Es eficaz para limpiar la piel, remueve impurezas y deja una dermis suave y tersa. Con un algodón en seco vierte unas gotitas y pásala suavemente por tu rostro durante unos minutos. Luego, enjuaga y siente la textura tersa de tu dermis.
El Bicarbonato como exfoliador: Además de ser barato es archiconocido en supermercados y sirve para todo. Y en nuestra piel no es la excepción. Mezcla una cucharada de este ingrediente, dos de miel y una pisca de sal. Obtendrás una pasta porosa. Luego masajea con movimientos circulares, sobre todo la zona T. Déjala durante 10 minutos y enjuaga con abundante agua. ¡Vualá! A disfrutar una piel suave y limpia.
El pepino, un refresco para tu piel: ¿Necesitas resucitar tu rostro ahora? Este fruto es la solución. Sirve para todo tipo de piel. Sólo debes seguir estos pasos: Licúa el pepino hasta crear una textura perfecta, la aplicas durante 15 minutos en tu rostro, y posteriormente retiras con agua. Otro tips es que puedes utilizar sus rodajas sobre tus ojos y verás cómo refresca de forma instantánea.
Máscara anti- Arrugas: De preparación fácil, sólo necesitas papas, aceite de oliva, limón y miel en bajas cantidades. No olvidar coser las papas hasta que se ablanden. Haz un puré, agrega una cucharada de miel, jugo de limón y aceite. Se aplica entre 20 y 30 minutos. Tras retirarla con abundante agua verás cómo contribuyen estos ingredientes a la renovación celular de tu rostro.